Si algo no te mata, mutará y lo volverá a intentar. 2020: comienzo del Año Santo Krugeriano

Primera de cuatro entregas de un análisis esclarecedor, que en manos del autor adquiere la forma de sacudida, acerca del impacto de la gestión de la información durante la pandemia en la configuración de nuestro pensamiento individual y del imaginario colectivo, con la contribución culpable de una parte del sector tecnológico y de los responsables públicos
Javier Sirvent
15 de febrero de 2022 | Compartir: Compartir en twitter Compartir en LinkedIn
Si algo no te mata, mutará y lo volverá a intentar. 2020: comienzo del Año Santo Krugeriano

Lo primero que tengo que explicarte si me lees por primera vez es: ¿Qué es un #Krugeriano?

La pandemia de Krugeranismo tiene su origen en una cepa con la que hemos luchado los seres humanos durante miles de años, se llama Razón, Conocimiento y Sesgos cognitivos.

Voy a tratar de explicártelo de forma que después de leer este manual/artículo, también te sea fácil detectar un Kruger a simple vista. Es cierto que mi método no es precisamente científico, aunque debería serlo, puesto que está basado en los estudios del premio IG Nobel de Psicología entregados en el Instituto Tecnológico de Massachusetts el año 2000 a los investigadores de psicología: David Dunning y Justin Kruger.

Voy a intentar resumirlo con varios ejemplos adaptándolo a la realidad de estos años. De esta forma tú podrás obtener un diagnóstico rápido, sencillo y fiable, a excepción de algún falso negativo que puedas encontrarte. Sin embargo, dada la R0 exponencial de este virus psicológico del siglo XXI, rara vez te equivocarás.

La herramienta que yo utilizo es una especie de “Test Rápido”, similar al #RascaDeNavidad (MadeInChina) que todos hemos usado durante estos últimos meses masivamente. Mi “kitKruger” te permitirá identificar casos asintomáticos y altamente contagiosos a los que etiqueto mentalmente como: #PalabritaDeKrugeriano. Estos maravillosos especímenes de opinión inquebrantable y veraz, los he podido encontrar camuflados como tertulianos en diversos medios de comunicación tradicionales y como expertos en diferentes redes sociales. Empezando por las “más académicas” como LinkedIn (ironía modo ON) hasta las más usadas del tipo: Whatsapp, Twitter, Youtube, Tiktok, ClubHouse e incluso en Twicht.

Se pueden encontrar auténticas joyas multimedia que quedarán para la posteridad como reliquias científicas demostrando lo atrevida y soberbia es la ignorancia, pero algunos discursos Krugerianos como los que nos explicaban que después del confinamiento habría una recuperación en V, luego en M y ahora en K (de la Kaka que me asegurabas que sucedería hace meses), o el de los políticos que insistían en 2019 que estábamos sólo ante una pequeña desaceleración; algunos ya han sido borrados.

Twitter como el manuscrito de los Upanishad.

Todos estos “Papers/Posts” no se validaron por el número de doctorados y estudios con los que se afirmaban estas conclusiones, sino por cantidad de Followers que tienen en internet y sus apariciones televisivas.

Del experto motivado al Krugeriano, sólo hay un Like de distancia.

Jamás ningún padre/madre se ha leído el prospecto completo de alguna de las vacunas contra la Difteria, Tosferina, Varicela, etc, que se han inoculado de “toda la vida” sin preguntarse dónde estaban fabricadas (China e India principalmente). Ahora, esos mismos progenitores siguen y visionan a Krugerianas buenorras con millones de seguidores que te bailan un Tiktok con música pegadiza y parodia “las vacunas” de ARNm pegándose cucharillas en el brazo gracias al grafeno que les ampliará la cobertura 5G del iPhone plateado de 1.600€ con el que se graban.

¿Te das cuenta qué maravillosa e increíble es la naturaleza evolutiva de nuestro planeta tierra?

De repente han aparecido del metaverso cuántico los expertos en NFT, Nanopartículas, Biogenética Sintética, Bitcoins, Gurús del TeleTrabajo, Agile, BlockChain, FinTech, CRISPR, ARNm, Inteligencia Artificial para dummies, enseñanza vs “cómo vender motos” en remoto a través de Zoom/Teams/Talks, o cualquier otra tecnología humana que hacía 20 años simplemente no existía, sí: ¡NO EXISTIAN!

Ojo, que sobre Volcanes Estrombolianos teníamos toneladas de bibliografía, pero “los Kruguer” se adelantaban a pronosticar el daño que se produciría en la fauna de la isla de La Palma y sin saber que los peces se habían largado hacía semanas.

La vida será cada vez más complicada, no sólo por las personas que hacen el mal conscientemente, sino gracias a los Krugerianos que opinan inconscientemente en infinidad de medios sin tener ni p*** idea.

La gravísima enfermedad del #Krugeranismo se detecta rápidamente cuando ves a un “experto/gurú” que le importa más recibir un #Like, dar un titular, que recibir una crítica o una opinión diferente a la suya. Si además “el Kruger” es un cargo político, es cuando este sesgo cognitivo de 1ero de Neanderthal lo eleva por encima del éter hasta el horizonte de los gilipollas cuánticos metaversianos.

Me gustaría destacar el “espécimen” de: #FuncionarioKrugeriano empoderado por el gobierno de turno para desarrollar un papel de experto predicador del futuro. Esta figura es realmente aterradora cuando descubres el extraordinario poder de influencia que puede ejercer gracias al manejo de los sesgos cognitivos con los que la pandemia del SarCov2 ha infectado también nuestros cerebros. Si, además, estos Krugers están justificados por los medios de comunicación como “referentes” es cuando hay que echarse a temblar porque añaden una percepción extra de distorsión a la realidad y nos condicionarán nuestro relato mental sine die.

¿Recuerdas a Salvador Krugerilla y Fernando KrugerSimón?

Del: España no va a tener como mucho más allá del algún caso, al: La mascarilla no es clave para detener la pandemia.

No todos los relatos Krugerianos de los últimos meses han estado relacionados con la muerte y el desconcierto moral de miles de personas. Otro ejemplo de distorsión de la opinión es cuando el CIS predice un “vuelco FLASH” de determinado partido político de cara a unos próximos comicios y este produce el efecto “inconsciente” de que una parte de los votantes de otras opciones políticas se desmotiven y no vayan a ejercer su derecho constitucional. Este Modus Operandi se ha visto especialmente amplificado por el agotamiento pandémico que ha provocado en la sociedad los 2 años de oleadas de miedo + confinamiento VS placer + libertad de las mascarillas, utilizados de forma simultánea a cadencias u olas de pánico: el resultado ha sido llevarnos a una esclavitud mental de primero de manual de psiquiatría.

Estos constantes Tsunamis de Infoxicación gubernamental producen, en muchos casos, que los votantes se replanteen su decisión política. Las estrategias de astroturfing pueden ser, por lo tanto, muy efectivas. Es más discutible en cambio que el objetivo final del cliente pueda materializarse al 100% gracias o únicamente por una campaña de este tipo. Sin embargo, un partido político, una asociación o cualquier otro grupo de presión ministerial puede contratar a la mejor agencia (campaña en TikTok, Facebook, Twitter…) especializada en astroturfing. Para hacerse con la opinión mayoritaria hay que estar perfectamente coordinado con el resto de los canales e intervenir constantemente en la conversación que se produce en redes sociales a favor de una corriente y, al mismo tiempo, en contra de sus adversarios.

Está demostrado que el astroturfing puede inclinar la balanza a su favor en un determinado porcentaje entre un 10% o un 20%, pero si la organización interesada no pone de su parte, no hay bot ni trol capaz de lograr el objetivo de condicionar la opinión pública; perdón NO LO HABÍA antes de la Covid19. Ahora ya no nos acordamos, pero tenemos multitud de ejemplos recientes como el Brexit, la elección de Joe Biden o el asalto al Capitolio con Donal Trump como Krugeriano mayor.

El problema de esta década es que la gente NO QUIERE SER UTIL, sino INFLUENCER y adquirir MÁS PODER.

Cuanta más atención se le presta al Krugeriano en cualquier medio de comunicación o red social, más levanta los pies del suelo, eleva su narcisismo intelectual y entonces es cuando hay que disparar todas las alarmas mentales siendo plenamente consciente de que con toda probabilidad te encuentras frente a un espécimen muy contagioso de Sesgo Dunning-Kruger.

Esta metodología de diagnóstico debería de aparecer en el vademécum de 1ero de pandemia (ojo, que probablemente me haya infectado de esta pandemia de conocimientos asentados e inalterables y que no tienen nada que ver con la tecnología).

¿Qué ha pasado con todos estos kruguerianos que establecían conclusiones y recomendaciones con absoluta certeza?

Sigo particularmente impactado cuando escuché al presidente de España Pedro Sánchez anunciar el 10 de junio del 2020, el fin del Corona Virus SarsCov2. Desde entonces, ha habido más de 100.000 muertos en nuestro país y por encima de los 5.700.000 en el resto del mundo; y se siguen haciendo promesas o realizando afirmaciones inquebrantables en cualquier ámbito de nuestras vidas.

Ahora, de un día para otro, las dosis de la vacuna (sin especificar el tipo de tecnología), pasa de recomendarse de ponerse al mes después de la infección, a los 5 meses, sin embargo, en Israel es completamente al revés y están inoculando el 4rto Shot como si no hubiera mañana; ¿por qué será?

¡No nos importa! Ya sabemos perfectamente identificar a los #Krugerianos y confiamos en todo lo que nos dicen: Las mascarillas ayer sí eran obligatorias; la semana que viene ya no hace falta… y así con todo.

Realmente no es que todo el mundo se haya vuelto un erudito en “cosas exponenciales” que hace unos pocos años no existían, sino que esta pandemia del #ExpertoMotivado empoderado por las redes sociales, los gobiernos y los medios de comunicación, nos ha sobrepasado para convertirse en una pandemia de Krugerinización con la que tendrá que convivir la humanidad el resto de los tiempos; difícil arreglo tiene esta #NuevaRealidad, porque normal no va a volver a ser nada; y lo sabes.

Aviso: ¡Y lo que nos queda por soportar a Super Expertos en conflictos bélicos internacionales y los Krugerianos en geopolítica energética ecofriendly!

Próxima entrega, el martes 22 de febrero, con el título «2021: De lo imposible a lo improbable y tecnológicamente viable del presente»

Scroll al inicio
Esta web utiliza cookies propias y de terceros para su correcto funcionamiento y para fines analíticos. Contiene enlaces a sitios web de terceros con políticas de privacidad ajenas que podrás aceptar o no cuando accedas a ellos. Al hacer clic en el botón Aceptar, acepta el uso de estas tecnologías y el procesamiento de tus datos para estos propósitos. Más información
Privacidad