No te pido admiración, pero sí respeto

Denostar la figura de los empresarios por nuestra clase política parece que está abiertamente permitida. Tampoco me parece tan extraño, el nivel del debate político y económico en España cada vez es más bajo. No quiero hacer ninguna mención sobre nuestros representantes políticos, así evitaré caer en sus mismos hábitos.

Hoy dedico esta columna en ATLAS TECH REVIEW a dos cosas: la primera es reclamar una mayor dosis de respeto entre las personas. La segunda, en mi condición de emprendedor beneficiado por el compromiso de Juan Roig con los emprendedores, rendirle el respeto que se merece.

Hace muchos meses que dejé de confiar en las políticas del Gobierno de España para reactivar la economía. No creo que los PERTE ni las políticas relacionadas con el Plan de Restructuración vayan a cambiar la realidad industrial con la que trabajo todos los días. De hecho, creo que no soy el único que lo pienso. Hay muchas empresas que, tras parar sus inversiones en digitalización, automatización y transformación digital, ya han empezado a buscar soluciones a sus retos de digitalización sin esperar a que un proyecto PERTE se los resuelva. Cierto es que hay muchas empresas que siguen en la cola de la subvención, pero cada vez son las menos.

Pero estar convencido de la incapacidad de nuestro Gobierno para gestionar una oportunidad tan relevante, no me ha posicionado en el lado de la descalificación continua, y eso que estoy convencido que proyectos como ATLAS TECNOLÓGICO deberían estar recibiendo importantes ayudas por la aportación de valor al ecosistema industrial y tecnológico. En mi opinión este es un debate muy importante que debería tratarse con seriedad, argumentos y sin descalificaciones a nadie, incluso por muy grandes que hayan sido sus errores.

Por qué no actúan con la misma templanza nuestros dirigentes políticos cuando hablan de los empresarios. Considero que cualquier empresario puede ser criticado, pero nunca descalificado. Evidentemente en el Gobierno de España, el fin justifica los medios. Agotar la legislatura es un objetivo. En cualquier empresa privada, si un alto directivo de la empresa realizara una crítica a un ministro del Gobierno de España, en el mismo tono y violencia con la que Ione Belarra criticó a Juan Roig, al día siguiente se convocaría un Comité de Dirección o Consejo de Administración y se cesaría al directivo o directiva implicado en la crítica.

Hace tres años nunca me hubiera imaginado escribiendo este artículo. Reconozco que conocer mejor a Juan Roig y como se suele decir, conocerle por sus obras, gracias a que ATLAS TECNÓLOGICO se acelera como proyecto empresarial en LANZADERA, me ha cambiado mi percepción de un empresario al que siempre he tenido en gran consideración, pero quizás no hasta alcanzar la admiración como puedo tener por él en estos momentos.

No soy muy partidario de las defensas en bloque que se producen muchas veces entre políticos o como ahora ha ocurrido, entre empresarios. Me parece que es dar importancia a hechos que deberían ser poco relevantes de no ser por la finalidad última que se persigue, el intervencionismo de los precios agrícolas en nuestro país, pero sí que es cierto que quizás he echado en falta algún posicionamiento de algún emprendedor beneficiando por la cobertura del ecosistema LANZADERA.

Por eso, dedico mi columna en el suplemento con el que ATLAS TECNOLÓGICO quiere crear un hub de conocimiento a agradecer a Juan Roig su ayuda desinteresada al ecosistema emprendedor español.