La Conectividad y los Objetivos de Desarrollo Sostenible

A estas alturas, se ha vuelto trillado señalar que el mundo se está haciendo más pequeño a medida que las conexiones entre todos nosotros se hacen más estrechas. Las divisiones entre lo local y lo global siguen reduciéndose a medida que nos damos cuenta de que las acciones en una parte del mundo repercuten en todas las demás. No hay más que ver el último año de pandemia para comprender que los flujos y movimientos globales nos han unido a todos de forma distinta y poderosa.

Los llamamientos a la sostenibilidad mundial también han puesto de manifiesto nuestras conexiones, responsabilidades y oportunidades mutuas. La Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible de la ONU, ha esbozado 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) clave destinados a ‘mejorar la salud y la educación, reducir la desigualdad y estimular el crecimiento económico, al tiempo que se aborda el cambio climático y se trabaja para preservar nuestros océanos y bosques’.

Conseguirlo no será fácil, pero hay signos prometedores de avance. Gigantes tecnológicos como Apple, Microsoft, Amazon y Google, entre otras, están ayudando al comprometerse a ser neutras en carbono y a reducir los residuos electrónicos. Tanto las grandes instituciones como los inversores particulares también pueden ‘hablar con su dinero’ invirtiendo en nuevos fondos de inversión que se centran en empresas que siguen prácticas de sostenibilidad.

Sin embargo, aquí me gustaría llamar la atención sobre cómo el crecimiento de la tecnología 5G podría ser un arma oculta en la lucha por la sostenibilidad global: un catalizador de la conectividad que ofrece una forma indolora de ayudar al planeta y a sus habitantes. De hecho, el 5G puede desempeñar un papel clave en muchos de los 17 ODS de la ONU, gracias a su capacidad.

¿Cuál es la fórmula secreta que aporta el 5G para ayudarnos a avanzar hacia una mayor sostenibilidad? Gran parte de las noticias sobre 5G giran en torno a la gran velocidad de descarga que tendremos cuando queramos ver una película, pero al pensar en la sostenibilidad, la clave principal será la enorme capacidad que ofrecen las redes 5G. El 5G puede manejar enormes magnitudes de tráfico móvil. Este aumento de la capacidad no solo implica la posibilidad de manejar los requisitos de datos cada vez mayores de nuestra creciente demanda de vídeo móvil, sino que también significa el apoyo a un aumento exponencial de los sensores que impulsarán las ciudades inteligentes, las fábricas inteligentes, la agricultura inteligente y mucho más.

Son precisamente estos sensores, habilitados por el 5G, los que ofrecen una esperanza oculta en el camino hacia la sostenibilidad. A medida que se despliegan más y más sensores, hay una oportunidad para un uso mejor y más eficiente de los recursos en nuestras comunidades cada vez más conectadas:

· El alumbrado público inteligente puede ayudar a mover el tráfico de forma más eficiente y a limitar los tiempos de espera, lo que, a su vez, ayuda a reducir las emisiones de carbono.

· Los agricultores pueden utilizar sensores para ser más eficientes en el riego de los cultivos, ajustando automáticamente el uso del agua en función de las temperaturas en tiempo real, los cambios meteorológicos y los niveles de humedad del suelo.

· Los sensores pueden ayudar a evitar el desperdicio de alimentos de múltiples maneras, desde ayudar a identificar el momento ideal de la cosecha en el campo hasta planificar las rutas de transporte más eficientes y controlar la frescura una vez que los productos están en el estante de la tienda.

· La salud de los océanos y las poblaciones de especies amenazadas (tanto en tierra como en el mar) pueden seguirse y controlarse de formas nunca antes imaginadas.

· Se pueden crear automáticamente patrones de uso eficiente de la energía a medida que los sensores controlan las temperaturas interiores en función de la capacidad de vigilancia y los patrones de tráfico.

Y si nos vamos más allá de los sensores, una mayor conectividad de la red significa también mayores oportunidades para establecer conexiones saludables entre las personas. Desde el punto de vista de los ODS de la ONU, el 5G y el aumento de las conexiones de red pueden conducir a una mayor equidad para aquellos que anteriormente se han quedado atrás o no han tenido las mismas oportunidades:

· Nuevas y mayores oportunidades de educación a distancia para poblaciones de todo el mundo, incluso para aquellas que antes no tenían acceso.

· La mejora de la asistencia sanitaria, las consultas de especialistas y (eventualmente) la cirugía a distancia pueden aumentar el bienestar y la atención a zonas de todo el mundo en las que no se disponía de asistencia regular.

Si os fijáis lo mejor de estos ejemplos es que se requiere un esfuerzo adicional mínimo o nulo; los beneficios de la eficiencia se acumulan de forma natural como resultado del aumento de la conectividad y el uso de sensores. Consideradas individualmente, las mejoras pueden ser menores, pero cuando se amplían a todas las facetas de nuestras comunidades globales conectadas, lo incremental se vuelve exponencial.

Para las empresas de diversos sectores y casos de uso, la conectividad y la capacidad 5G pueden crear un escenario en el que todos ganan: una mayor eficiencia que conduce a un mejor resultado final y una mejor sostenibilidad para el planeta. Desde esta perspectiva, explorar nuevas opciones de conectividad y comprender cómo el 5G puede ayudar a las empresas también significa una oportunidad de ayudar potencialmente al planeta. No es el único camino ni el único factor que contribuye, pero si se mira con detenimiento, se pueden encontrar formas inesperadas e infravaloradas en las que el 5G puede ayudar a salvar nuestro planeta.

José Luis Casal es Senior Advisor, experto en modelos de negocio digitales, CMO de Booker y Board Member en Kabel Sistemas, OpenExO, Taalentfy, LUAFund. @jlcasal