¿Estamos innovando de forma adecuada?

Hablamos mucho en esta casa sobre transformación digital, industria 4.0 e incluso de inteligencia artificial. Nos centramos en la tecnología. Y a veces nos podemos perder en el detalle. Porque todos estos términos son los apellidos de un concepto mayor. La innovación.

Cada vez que buscamos una solución tecnológica para un reto de negocio, cuando hacemos proyecto para automatizar procesos, estamos innovando. Porque innovar consiste en desarrollar Y poner en marcha nuevos productos o procesos de negocio, diferentes a los que tenía la organización.

Por eso, más allá de ChatGPTs, Copilots y tecnologías varias, cada dos años en Innolandia hacemos un estudio sobre el CÓMO es el día a día de un profesional de la innovación. No de la empresa. Sino de la persona. Enfoque micro.

Y quiero compartir los 7 aprendizajes que hemos obtenido. Porque espero que te ayuden a generar e implementar proyectos de impacto.

1. Siempre innovan los mismos.

Hemos visto que el 65% de los innovadores tienen más de 5 años de experiencia. Eso, per se, no es malo. El problema es que cada vez hay menos personas que empiezan a trabajar en la función de innovación.

El porcentaje de “nuevos innovadores” se ha reducido en 9pp desde 2020. ¿Se está innovando menos?

2. La innovación abierta está consolidada.

El modelo de realizar proyectos en consorcios está consolidado. Los innovadores estamos cada vez más interesados en conseguir proyectos de impacto diferencial.

Los retos son cada vez más complejos, por lo que necesitamos diferentes puntos de vista y capacidades, que casi nunca tiene una sola organización.

3. Modelos de innovación “tradicionales”

La mayoría de los innovadores internos aplican modelos de innovación clásicos: comités de innovación + vigilancia tecnológica + proyectos colaborativos subvencionados.

Sin embargo, apenas se utilizan metodologías exploratorias, para proyectos de alta incertidumbre. Solo el 32% utiliza Design Thinking (baja 10pp desde 2022), 20% Lean Start-up y 30% Agile (baja 20pp desde 2022).

¿Estamos utilizando las herramientas correctas para nuestros proyectos?

4. La churrera de proyectos.

La principal tarea de los profesionales de la innovación es hacer proyectos (71%). Evidentemente. El gran riesgo es hacer proyectos porque sí. Construir una churrera de proyectos. La pregunta es ¿los proyectos están alineados con la estrategia de la organización?

Los datos son poco optimistas: las actividades de ideación y de la propia gestión de proyectos están poco profesionalizadas: mínima dedicación interna a idear, no se aplican métodos profesionales de gestión de proyectos como Kanban, Scrum, o PMBOK. Nos dedicamos a tachar acciones en un Excel.

5. La brecha entre innovadores serios y el resto.

Ya vimos en 2020 durante el COVID que, en momentos de crisis, cuando surgen las diferencias entre los adultos y los niños, se tomaban dos opciones: pararlo todo o acelerar a muerte.

Esta tendencia se ha profundizado. Se amplía la brecha entre innovadores “en serio” y el resto. Los que intentan construir un sistema repetible de innovación y dedican recursos estructurales. Los que hacen proyectos y se tienen que buscar la vida para conseguir financiación.

6. Las barreras estructurales de siempre.

En un entorno cada vez más complejo y acelerado, los profesionales de innovación se encuentran con falta de tiempo y un día a día dedicado a apagar fuegos. No solo lo dicen los datos (27% lo considera la barrera principal).

En cada mentoría que hacemos, en cada café en un taller, cuando nadie nos oye, nos cuentan secretos: Ángel, esto es una locura. El ritmo exponencial de aceleración tecnológica, empezando por la IA, es imposible de seguir.

7. Early adopters en el uso de la IA generativa

El 61% de los profesionales de la innovación utilizamos la IA de forma muy frecuente (diaria o semanal). Eso son 7pp más que solo 9 meses antes. Y subiendo. Especialmente en tareas de generación de ideas (65%) y a gestión de proyectos (41%).

Y la herramienta estándar es ChatGPT (87%) de los usuarios. Curiosamente, el 100% (sí todos) de las personas que utilizan Copilot a nivel corporativo, tienen cuenta personal de ChatGPT.

Con todo esto, hemos visto un patrón recurrente. Los profesionales de la innovación tienen experiencia demostrada en hacer proyectos. Pero actualmente no les da la vida, se pasan el día apagando fuegos. Les gustaría desarrollar proyectos de gran impacto y construir culturas innovadoras.

Por eso, cuando descubrieron la IA generativa, se lanzaron como locos a utilizarla para generar esas ideas y hacer proyectos. Sin embargo, los resultados no están llegando. Porque aplican formas de innovar muy tradicionales. No dedican tiempo ni herramientas a idear o explorar ideas radicales.

Mi aprendizaje en esta edición de la Radiografía del innovador (descargar aquí) es que el futuro de la innovación no se trata solo de hacer más proyectos, sino de hacerlos de forma diferente, para tener más impacto. Explorar, seleccionar, incorporar metodologías profesionales y aplicar la IA generativa en los procesos de innovación de forma estratégica.

Pero de todo esto, os hablaré en el #CollaborateMurcia.