Cirugía robótica, búsqueda de minas antipersona y transporte de mercancía, logros de los robots colaborativos
El modelo Da Vinci para hacer las intervenciones quirúrgicas menos agresivas, máquinas para buscar minas antipersona como LT2 Bulldog Tactical Robot o vehículos autónomos para transportar mercancía como Waymo Via son algunos ejemplos de robótica colaborativa
Desde hace muchos años los robots se utilizan en la industria, pero a día de hoy se puede decir que son una pieza clave en la implementación de la industria 4.0, ya que permiten la automatización de tareas repetitivas y la ejecución de otras difíciles, peligrosas o agotadoras para las personas.
A medida que crece la población mundial, también lo hace la necesidad de puestos de trabajo y se abren nuevas oportunidades y retos para la robótica. Algunos futuristas han predicho que los robots reemplazarán a los humanos en todos los trabajos, pero otros insisten en que predominarán los robots colaborativos que solo se harán cargo de tareas específicas para ayudar a los humanos.
La medicina es uno de los campos donde más esenciales puede resultar la robótica colaborativa. La cirugía robótica suple las limitaciones de la cirugía laparoscópica convencional haciendo más cómodas y más precisas las intervenciones quirúrgicas, sobre todo las más complejas y de acceso difícil.
La Clínica Universidad de Navarra, siempre a la vanguardia en nuevos sistemas diagnósticos y terapéuticos, cuenta desde 2010 con el robot Da Vinci para realizar intervenciones con mínima agresión. La máquina proporciona una mayor precisión quirúrgica, un procedimiento menos invasivo, eliminación del temblor natural de la mano del cirujano y una mejor visualización del campo anatómico que se opera son las principales.
Las especialidades médicas indicadas para el uso quirúrgico del robot Da Vinci son cirugía general, urología, cirugía cardio-torácica, cirugía pediátrica, determinadas patologías de ginecología, otorrinolaringología y algunas indicaciones de neurocirugía.
Otro de los ámbitos en el que ya se están utilizado robots y aumentará su uso en el futuro es el militar, ya que en muchos países ya suponen una opción para defenderse de delitos, terrorismo y otras amenazas. Por ejemplo, el modelo AlphaDog se utiliza para transportar víveres, mercancías, armas u otras cargas pesadas.
Para reconocimiento del terreno hay máquinas dedicadas principalmente a la evaluación del terreno y búsqueda de peligros potenciales o trampas, como minas antipersona, bombas o presencia de tropas enemigas, como LT2 Bulldog Tactical Robot. Esto permite a los soldados tomar decisiones esenciales sin correr el riesgo de lesionarse.
En el caso de búsqueda y rescate, la labor principal del robot es ayudar en las tareas de búsqueda de personas, en caso de desapariciones, caídos en combate o víctimas afectadas por derrumbamientos, como el modelo Battlefield Extraction Assist Robot o BEAR.
Cada vez se habla más de la conducción autónoma y de vehículos que son capaces de funcionar sin conductor. Waymo, empresa desarrolladora de vehículos autónomos presenta modelos de vehículos aptos para pasajeros y para mercancías. Waymo Vía, su línea de camiones para transportar mercancía, está diseñado para mejorar la seguridad y aumentar la eficiencia.
La tecnología que guía los vehículos, Waymo Driver, incorpora una computadora de respaldo integrada ejecutándose siempre en segundo plano, y está diseñada para detener el vehículo de forma segura en caso de detectar algún error en el sistema principal, así como sistema anticolisión y de detección de accidentes de respaldo y sistemas redundantes de medición inercial para el posicionamiento del vehículo.
La empresa desarrolló también un proceso sólido que identifica, prioriza y mitiga las amenazas de seguridad cibernética de acuerdo con las prácticas recomendadas establecidas por la industria y el gobierno.
Retos para los fabricantes de robots
Universal Robots, la empresa de robótica universal, destaca cuatro principios fundamentales de cómo los fabricantes deben adoptar e implementar procesos de robótica en sus operaciones. Uno de ellos trata sobre poner a los humanos por encima de los robots, y no solo en términos de seguridad, sino también al implementar el robot como una herramienta para utilizar mejor el conocimiento y la experiencia del ser humano.
Entender los procesos es otro aspecto vital a tener en cuenta. Un error común es que las organizaciones que son nuevas en los procesos robóticos intentarán mezclar procesos manuales y robóticos, y lo que hay que hacer es comprender los procesos manuales y llegar a un concepto de celda robótica que llene el vacío.
También es necesario minimizar el desperdicio no solo de materiales sino también del potencial humano, es decir, cuando los empleados humanos son capaces de hacer mayores contribuciones a los procesos de la organización, pero no pueden hacerlo debido a otras tareas que deben realizar.
Aprovechar las habilidades de la organización y la flexibilidad de los robots colaborativos y usarlos como una herramienta para impulsar la mejora continua. Lo que toda industria, negocio o persona debe hacer es dar pequeños pasos en dirección a la perfección, ya que sus primeras implementaciones robóticas no serán la últimas. Una vez que superen el desafío de instalar su primer robot, ya estarán buscando el siguiente.