
Gaia-X ante su mayor reto: convertir la soberanía digital europea en una herramienta útil para las pymes

Organizado por Gaia-X Hub Spain con el apoyo de ITI, el evento Market-X y Tech-X de Gaia-X, celebrado en Valencia, refleja el avance de una iniciativa que busca ofrecer una alternativa a la concentración del mercado de la nube, hoy dominado en un 80% por tres grandes compañías estadounidenses, y fomentar una infraestructura de datos interoperable bajo estándares europeos. Pero son muchos los retos a superar: se requiere confianza y pisar el acelerador para aterrizar el modelo a las pymes, y lograr espacios de datos con suficiente volumen para alimentar a la IA.
Gaia-X se enfrenta ahora a uno de sus mayores desafíos: hacer comprensible y útil su modelo para las pymes. Aunque el marco conceptual y filosófico es brillante, la complejidad técnica y burocrática del modelo europeo puede dificultar su implementación práctica. Christoph Strnad, CTO de Gaia-X, ha abordado en su ponencia “Why the Gaia-X Trust Framework Matters?” el valor de la confianza como elemento estructural de los espacios de datos. Y ha asegurado que no basta con buenas intenciones o definiciones filosóficas: la confianza debe ser verificable y medible. “La confianza es un lubricante fundamental en cualquier sistema social. Reduce fricciones, hace que todo funcione mejor. Pero no basta con creer: hay que testear, verificar y asegurar esa confianza en todo el ecosistema”, ha defendido.
El objetivo a medio plazo es contar con un modelo de espacios de datos homologable y certificado hacia 2027. Pero es urgente acelerar. La inteligencia artificial necesita volumen de datos, y si Europa no se organiza y comparte, no podrá competir. Gaia-X debe convertirse en algo práctico, útil y accesible. El evento quiere demostrar que la visión de Gaia-X empieza a aterrizar en estrategias locales, empresas reales y políticas urbanas, aunque persisten desafíos para extender su adopción entre el tejido empresarial más pequeño. La clave, según todos los ponentes, será crear confianza, experimentar, estandarizar… y acelerar.
La jornada ha arrancado con la bienvenida de Ulrich Ahle, CEO de Gaia-X, y de Daniel Sáez Domingo, presidente de Gaia-X España y director de inteligencia estratégica en ITI. Sáez ha recordado cómo la Comunidad Valenciana se ha convertido en un punto neurálgico para Gaia-X, tras haber acogido el Valencia Summit y el Gaia-X Summit en Alicante en años anteriores. “Valencia está desempeñando un papel importante en distintas iniciativas europeas. Lidera el Consorcio Europeo de Infraestructuras Digitales (EDIC) sobre Gemelos Digitales y Citiverso, que presidirá durante los próximos dos años con 14 países ya adheridos”, ha señalado.
Además, ha defendido que España y Valencia cuentan con un potente ecosistema tecnológico y una trayectoria de más de 30 años en la creación de tecnologías centradas en los datos. “Estamos en la era del dato. Hay muchas oportunidades, pero también riesgos que debemos gestionar, como la privacidad, la seguridad o la portabilidad”, ha advertido.
Desde Gaia-X España se ha subrayado la necesidad de consolidar la economía del dato en España a través de cuatro pilares: la convergencia tecnológica, la conciencia social y empresarial, la experimentación cercana al mercado, y la regulación y estandarización. “Queremos crear un futuro brillante para España en espacios de datos. Es fundamental comunicar, educar, impulsar iniciativas y promover su adopción real, especialmente entre pymes”, ha afirmado Sáez.
En conversación con Atlas Tecnológico, Daniel Sáez ha destacado el papel de los centros tecnológicos, como el ITI, que son clave para acompañar a las empresas en el proceso de adopción. “Somos los sherpas de las empresas. Les damos confianza y les ayudamos a entender los pasos necesarios para formar parte de estos espacios de datos”, ha añadido.

Valencia Innovation Capital
La intervención de David Rosa, director de Valencia Innovation Capital, ha mostrado cómo ciudad ha desarrollado una estrategia ambiciosa para posicionarse como un referente tecnológico en el Mediterráneo. Con un enfoque orientado a la resolución de retos urbanos, Rosa ha destacado el valor de los entornos sandbox y del Valencia Innovation Lab como espacios reales de testeo tecnológico.

“Valencia tiene una ventaja diferencial: buen clima, tamaño manejable y un ecosistema ágil. Queremos ser la ciudad más relevante del Mediterráneo en innovación aplicada”, ha apuntado. “Aquí no se compra tecnología, se experimenta con ella cerca del mercado real”. También ha resaltado la conexión del ecosistema local con ciudades como Múnich o Helsinki, y su vocación internacional. “Queremos expandir el modelo de Valencia a 11 ciudades del mundo”, ha explicado.