Órbita Ingeniería, un «socio» de confianza para la automatización y digitalización de la industria

Órbita Ingeniería se ha posicionado como un actor clave en la automatización y digitalización de procesos industriales, gracias a su capacidad «integral», que le permite abarcar soluciones llave en mano. A su vez, debido al «enfoque personalizado», la empresa logra establecer relaciones óptimas del tipo «socio» y «a largo plazo», según afirma José García Gámez, director general de Órbita Ingeniería, lo que asegura resultados eficaces. Con 20 años de trayectoria en el sector, la compañía ha desarrollado proyectos que abarcan desde el diseño y fabricación de maquinaria hasta la integración avanzada de sistemas de gestión de datos. Entre los aspectos diferenciales de Órbita Ingeniería destaca el “compromiso” hacía sus clientes y «la calidad» de los resultados. A su vez, colabora con empresas y organizaciones internacionales de primer nivel en distintos sectores de la actividad industrial: químico, cosmético, biotecnológico, automóvil, cárnico, alimentación y bebidas, entre otros, como el del agua.

Según afirma Vicente Fresneda, director de negocio de Órbita ingeniería, se trata de desarrollar «soluciones completas», que van «más allá de lo técnico». Al tiempo que sus servicios acaparan proyectos «llave en mano», como el diseño conceptual, ingeniería, fabricación, montaje en planta, validación y asistencia postventa.

Entre los éxitos alcanzados por Órbita Ingeniería, se encuentra su «proyecto a medida» para Matarromera, una compañía vinícola española referente en el sector internacional. La solución aplicada, Órbita Quality System (OQS), se trata de un sistema de control de calidad basado en inteligencia artificial (IA), destinado a las líneas de producción de vino. OQS asegura el control de calidad automático del embotellado, sin necesidad de revisión del personal de la bodega, incluso a altas velocidades. Al tiempo que, el desarrollo informático de Órbita ha permitido disponer de estadísticas de producción y defectos, así como, la comunicación entre sistemas superiores de planificación de recursos empresariales (ERP) o manufacturing execution system (MES).

Órbita Ingeniería también ha dejado su huella en la digitalización de la industria química, un sector de por sí demandante de tecnología y, según afirma Vicente Fresneda, «ha sido un reto técnico». Todo ello ha obligado a Órbita a estar en la vanguardia de la innovación al servicio del sector, como su “software de gestión de recetas para fabricación por lotes y pre pesadas”. Entre sus casos, la empresa ha llevado a cabo el diseño, construcción y puesta en marcha de una nueva planta de fabricación para Asevi (Químicas Pons). El correcto diseño mecánico, eléctrico y de control, la ejecución y control de calidad y validación, sumado a la eficiencia del software, se tradujo en el aumento de la eficiencia operativa, optimización en la gestión y ahorro de costos.

Respecto al futuro de la industria y tecnología, José García Gámez, anticipa que “el 6G va a suponer una revolución tremenda”, y afirma que «tecnologías como esta transformarán no solo la forma en que operan las máquinas, sino también cómo interactúan y se comunican». A su vez, sobre el panorama industrial español asegura que atraviesa «una fase de transformación». Frente a ello y en el contexto actual, Órbita Ingeniería ha decidido diversificarse hacia sectores como la energía y alimentación, donde prevén un potencial de «crecimiento significativo». Al tiempo que, Francisco Mateo Rodríguez, director de negocio de Órbita, sostiene que “el sector de la energía será un sector tractor”, y afirma que en ese camino se direcciona Órbita Ingeniería.

La empresa no solo ofrece soluciones de automatización y digitalización, sino que se posiciona como un socio estratégico en la evolución de la industria. Su enfoque integral y personalizado, junto con su innovación, le permite adaptarse a un entorno en constante cambio. Con proyectos en sectores exigentes y una visión clara hacia el futuro, Órbita Ingeniería está preparada para aumentar su liderazgo hacia la transformación industrial, en un mercado que demanda mayor calidad, adaptabilidad y sostenibilidad.