Marco Laucelli (Galeo) en La Hora Premium: “Empezamos a ver redes de IoT a gran escala”

Entramos en una fase interesante de la transformación digital, una que nos atrevemos ya con esos ámbitos “en los que la conexión del mundo físico y el digital resulta más complejo”. El fundador y CEO de Galeo y colaborador de Atlas Tecnológico, Marco Laucelli, explica en La Hora Premium que una de las tendencias actuales consiste precisamente en “traer soluciones que sabemos que funcionan en sectores maduros y ver cómo aplican” en esa tarea.

“Estamos viendo un aumento notable en tratar de comprender qué significa el gemelo digital, para qué sirve, cómo se integra, cómo se relaciona con tecnologías como IoT (internet de las cosas) o big data”, afirma. Las empresas con fuerte componente físico son conscientes ya de que tienen que dialogar con las nuevas tecnologías y entenderse, porque “en torno al gemelo digital se están desarrollando aplicaciones que tendrán impacto en el medio y largo plazo”.

“El mundo hace 20 años estaba muy instrumentado, todo tenía sistemas de control y para gestionarlos nos hemos visto en la necesidad de disponer de una capacidad de procesar información del entorno cada vez mayor”, continúa Marco Laucelli. Con el tiempo, el problema no ha dejado de aumentar, de modo que “cada vez más necesaria la complejidad interna para gestionar información”.

Vivimos en un mundo en el que “algunas autopistas ya son capaces de avisar si cae un bulto de un camión”, como sucede en el caso de las construidas por Ferrovial con tecnología de Galeo. Todas estas actuaciones se resumen en su empresa “bajo el concepto de activo digital: los activos físicos se digitalizan si se conciben como digitales. Ya no distinguimos un edificio de una canción de Spotify”.

Los activos digitales, “en 2023” aclara Marco Laucelli, tienen tres componentes: “el software que controla algunas funciones, que es algo que lleva existiendo mucho tiempo”; algo más novedoso: “cada vez tenemos más conciencia de que los datos son elementos propios del activo, porque son los que permiten que funcione ese software”; y una última cosa más importante aún: “un activo digital tiene que tener una interfaz con el resto del mundo y esto se llaman APIS, interfaces que otros sistemas, otros programas, pueden consumir”.

Una de las grandes tendencias emergentes del momento es que “empezamos a ver redes de IoT a gran escala. Cuando eso se hace aparecen un montón de problemas de operación de las redes muy complicados de resolver: cómo se distribuye el software, cómo se monitorizan activos… cuando se habla de entornos pequeños no es problema, pero a gran escala sí”.

Galeo se ha encargado de la digitalización de las redes estaciones de servicio de Repsol (en torno a 3.000 edificios) y recientemente Cepsa (500-700). “La solución ha sido un gemelo digital en ambos casos, aunque el uso haya sido distinto”. Con la compañía de transporte y logística Herko, el equipo de Marco Laucelli ha trabajado para “apificar los camiones y explotar todas las capacidades digitales del vehículo”.

“Hemos convertido también en API a las refinerías de Repsol, con 60-70.000 mensajes por segundo. Se digitalizan activos enteros, como el horno. Usando la información y especificación de construcción, más las señales, se genera el gemelo digital del horno como parte del gemelo digital de la refinería. Al ser un API lo pueden usar distintos consumidores dentro de la empresa: el analítico, la monitorización de gestión o los especialistas de mantenimiento”.

El sector tecnológico se pregunta, de hecho, “cuánta ingeniería necesitamos para construir el mundo digital, hay situaciones difíciles en las que no está claro qué conocimiento e ingeniería necesitamos. No sólo debemos sacar datos del activo físico, sino también de nuestro propio software que controla el activo. Las redes IoT capturan muchos datos del entorno, pero muy pocos sobre el software, los dispositivos, las capacidades de reacción… la observabilidad de las redes es muy inmadura. Para comprender cómo funciona el producto hay que mezclar todos esos datos. Es un challenge, no está resuelto”.

Otra cuestión clave: “Cuánto valen los datos de un edificio, cómo encaja el sistema BIM con el gemelo digital y con un sistema de monitorización. Trabajamos con estudios de arquitectura en crear gemelos digitales que se integren con los sistemas BIM y con todo el ciclo de vida de un proyecto, desde el diseño hasta la comunicación”.

A juicio de Marco Laucelli, hay que abordar también “cómo gestionamos la información para que sea valiosa para todos. El automóvil es un sector hiperregulado y la regulación afecta a todo el ciclo de vida del proyecto. Diseño, arquitectura de software, cómo se relaciona con el entorno. Conectar todo ese ciclo de información tiene un valor en el setor de la automoción de miles de millones de euros”.

Hablamos de “gestión de garantías, de postventa, de un modelo documental específico por país, para cada versión del coche, conectar esa documentación ingenieril con la monitorización de los vehículos es un challenge de un valor enorme y no se está empezando a hacer. Lo hemos empezado a hacer con Herko porque estamos trabajando con ellos desde el momento del diseño”.

Sugiere por eso el fundador y CEO de Galeo y colaborador de Atlas Tecnológico que “tenemos que hacer una analítica más sistémica, y menos de proceso. Tenemos información en bruto, pero todavía nos cuesta hacer este análisis”.