Javier Sirvent (La Hora Premium) anima a prepararse para recibir órdenes de la IA: “Estamos criando a un extraterrestre”

La última sesión de la temporada de ‘La Hora Premium’, el espacio de conocimiento dirigido a miembros Premium de Atlas Tecnológico, ha comenzado con una idea que ha protagonizado toda la intervención de Javier Sirvent: la inteligencia artificial ha superado la categoría de herramienta y entra en una fase autónoma que plantea nuevos desafíos. Bajo ese marco, ha presentado su ponencia ‘Horizonte 2026: la IA trascendió y, ahora, ¿qué?’, una reflexión basada en su reciente visita a China y en la evolución acelerada de estas tecnologías.

Sirvent ha abierto la charla con una pregunta directa: “¿Qué pasará cuando las órdenes las dé una inteligencia artificial?” Para ilustrarlo, ha citado la adopción del autopilot en las grandes ciudades chinas, donde el 5% de los vehículos circula de forma autónoma, señalizados con una luz verde en el parachoques. “El contraste es evidente”, señala. “En Europa dedicamos mucho esfuerzo a legislar, mientras ellos avanzan más deprisa”.

El experto ha defendido que esta será la primera generación que trabajará “con personas y con agentes”. En este punto, ha presentado a Maya, su asistente inteligente, activa desde abril, y ha explicado el funcionamiento de los sistemas multiagente, diseñados para repartirse tareas. Sobre ellos, ha lanzado un aviso: “el peligro no es que la IA nos destruya, es que nos vuelva locos cuando veamos todo lo que puede hacer por nosotros”.

Ha planteado también si conviene tratar de forma irrespetuosa a estos sistemas. “¿Es buena idea maltratar o engañar a una inteligencia artificial? Estamos manejando seres inteligentes y quizá los inteligentes no seamos nosotros”.

En su exposición, Sirvent ha mencionado un modelo autónomo capaz de recorrer 106 kilómetros sin supervisión. “Lo conozco, he estado con él y es una IA con patas”, ha asegurado, y ha defendido que En España aún no existe, “pero el año que viene lo vamos a ver”. Ha diferenciado esta tecnología del conocido perro robot. “Ese no es autónomo, funciona con mando; este sí”.

También, ha defendido la idea de que los coches autónomos ya ofrecen mayor seguridad que la conducción humana, y ha planteado un símil provocador recordando que, cuando los humanos fuimos más inteligentes que los monos “los monos los pusimos en un zoológico. ¿Qué pasará cuando el robot sea más inteligente que el humano?”. También, defendiendo la idea de la capacidad de adaptación y aprendizaje de las máquinas, ha compartido avances en los vehículos de Waymo, que aprenden a pitar según las circunstancias del tráfico. En este punto, ha explicado que los modelos actuales aprenden procesos y modelos de negocio, un paso clave para la siguiente etapa de la industria 4.0.

“La IA lo va a cambiar absolutamente todo. Este año ha sido muy intenso. Estamos en plena disrupción evolutiva, en la sexta”. Ha asegurando que vivimos un Nuevo RenAIcimiento, impulsado por un ritmo de mejora cada vez mayor, y ha Jensen Huang, CEO de Nvidia cuando afirma que la IA avanza a 317 veces la ley de Moore. A su juicio, el futuro llegará antes de lo previsto: “no está en 2030. Va a llegar en semanas o meses”.

Para ilustrar esa rapidez, ha hablado sobre el cociente intelectual equivalente de algunos modelos. En 2024 rondaban los 96; en abril de 2025 subían a 130–144; hoy están cerca de 160. “¿Qué va a pasar cuando lleguemos a 200?”. Y ha recordado las palabras del jefe de IA de Meta: “la superinteligencia está a punto de llegar”.

“Estamos criando un extraterrestre. ¿Qué va a pasar? No lo sabemos”, ha asegurado. Incluso ha planteado que en los próximos años una IA podría explicar “qué es el alma humana”.

El experto marca 2026-2027 como un punto de inflexión en la autonomía de estos sistemas y 2028-2029 como una fase de convergencia. Para mostrar cómo las diferencias de la industria china (y norteamericana) y la europea, ha comentado un ejemplo práctico: Volkswagen necesita 30 horas para producir un coche; Xiaomi solo una, con plantas altamente robotizadas.

En este sentido, ha advertido que el sector del automóvil afrontará “una guerra de sistemas operativos muy fuerte” y que las IA podrán asumir funciones como negociar pagos. Para Sirvent, la clave está en adaptarse. “Nada es imposible, todo es improbable. No aguantará el más fuerte, sino el que mejor se adapte. Y En Europa vamos a tener un problema si no lo hacemos”.

Sirvent ha cerrado su intervención con una defensa del aprendizaje continuo y de la colaboración entre empresas. “Esto va a 317 veces la ley de Moore. Si no te subes estás mal”. “Disfrutad del hoy porque el mañana nadie sabe lo que es”, ha concluido.