De residuos a hidrógeno: 300 plantas para ahorrar 30 millones de toneladas de Co2 al año
La colaboración entre Siemens y Boson Energy converge en Waste-to-X-Solution, una tecnología que convierte residuos no reciclables en hidrógeno, energía verde y competitiva que emplearán para diversas aplicaciones, el proyecto prevé extenderse a "escala global"
Siemens y Boson Energy potencian la transición hacia la energía verde, a través de una tecnología de conversión de residuos en hidrógeno, llamada Waste-to-X solution. El acuerdo firmado entre ambas entidades propone desarrollar la red energética local de forma segura y sostenible, a través de una infraestructura de carga de vehículos eléctricos impulsada por hidrógeno, sin comprometer la estabilidad de la red o los precios del consumidor.
El proyecto se iniciará en Suecia, Polonia y Alemania, para luego extenderse a «toda Europa», según Boson Energy, que a su vez proyecta su presencia a «escala global». También prevé establecer más de 300 plantas, para producir un millón de toneladas de hidrógeno circular obtenido de residuos a partir de 2030, lo que supondrá un ahorro de alrededor de 30 millones de toneladas de emisiones de CO₂ al año.
Según el acuerdo, firmado durante la Feria ACHEMA en Frankfurt, el objetivo de la unión consiste en crear un modelo «escalable y eficiente» para convertir los residuos en hidrógeno limpio. Esta colaboración no solo aborda la necesidad urgente de seguridad energética local, sino que también contribuye a reducir la huella de carbono global y allana el camino hacia un futuro más sostenible.
Axel Lorenz, CEO de automatización de procesos de Siemens Industrias Digitales, sostiene que «la digitalización y la automatización son cruciales para la creación y ampliación de capacidades de producción», más aún en procesos complejos como el «reciclaje termoquímico». Al tiempo que Jan Grimbrandt, CEO de Boson Energy, afirma que Siemens le aporta una «capacidad ilimitada» para escalar y llegar a los mercados «desde Berlín a Delhi y más allá».
El enfoque de la alianza plantea facilitar la colaboración tecnológica, que convierte residuos no reciclables en energía limpia. Acapara también el desarrollo de «un plan escalable y repetible» basado en la aplicación de la última tecnología de servicios digitales y software para alcanzar la optimización, estandarización y simulación tanto en la fase de fabricación como en la de operación, según afirman ambas protagonistas.
Uno de los puntos clave de la colaboración es el de integrar la tecnología de Boson Energy llamada Hidrógeno por Gasificación Asistida por Plasma (HPAG). Se trata de una solución «‘energy hub» que potencia el hidrógeno circular de los residuos de forma sostenible. El hidrógeno producido puede admitir aplicaciones fuera de la red, como la carga rápida, lo que facilita operaciones de red más confiables.
«El cambio climático representa uno de los mayores desafíos de nuestro tiempo», según Siemens, y su solución junto a Boson Energy proporciona una energía que contribuye a la descarbonización, debido a su producción distribuida de energía y a los productos químicos locales. Convierten así los residuos no reciclables en hidrógeno, que es competitivo en costes frente a los combustibles fósiles en el punto de uso.
La líder alemana afirma que pone a disposición de Boson Energy su tecnología para «cada paso» del acoplamiento sectorial, desde los procesos químicos iniciales hasta la estación de carga. A su vez, Jan Grimbrandt sostiene que la solución Waste-to-X prevé «marcar la diferencia en la sociedad y apoyar descarbonización global». La colaboración representa un importante paso adelante, en el avance de las tecnologías hacia la reducción de CO₂», dijo Stephan May, CEO de Electrificación y Automatización de Siemens Smart Infrastructure.