Isabel Fernández Peñuelas en la Hora Premium: “Debemos imaginar el futuro para cambiar el presente”

El futuro puede construirse y a través de él deben identificarse los distintos riesgos y oportunidades que puede atesorar una compañía, Isabel Fernández Peñuelas, Cofundadora y Directora de Estudios de Futuros en The Futures Factory relata en una nueva sesión de la Hora Premium, la importancia de los estudios de futuro para conseguir el éxito en cualquier organización
19 de abril de 2023 | Compartir: Compartir en twitter Compartir en LinkedIn
Isabel Fernández Peñuelas en la Hora Premium: “Debemos imaginar el futuro para cambiar el presente”

A menudo las empresas no plantean las incógnitas que pueden afectar a su evolución en el futuro, presionadas por la cuenta de resultadas y atrapadas en distintos dilemas disipan la posibilidad de imaginar el porvenir de la compañía. Isabel Fernández Peñuelas, Cofundadora y Directora de Estudios de Futuros en The Futures Factory y colaboradora en Atlas Tecnológico, ha explicado en una nueva sesión de la Hora Premium la importancia de cuestionar el futuro para descubrir oportunidades y riesgos tempranos.

Woody Allen, en su película ‘El dormilón’ encarna a un almacenista que ha permanecido congelado durante 200 años y que es despertado en el futuro por radicales antigubernamentales. “Esta pieza audiovisual encarna perfectamente la base de los estudios de futuro, los cuales consisten en el análisis de los futuros alternativos y de las visiones del mundo y los mitos que los subyacen”, contextualizaba la ponente.

El momento actual se encuentra marcado por la incertidumbre y el conflicto, por ello “pensar en el futuro nos permite identificar cuáles son las trayectorias que trazará el ambiente que nos rodea, en definitiva, debemos imaginar el futuro para cambiar el presente”, y añadía “existen diversas leyes en relación con la filosofía futurista, en primer lugar, se encuentra la creencia de que el futuro no puede predecirse, pero sí puede navegarse mediante escenarios. Por otra parte, la segunda ley rige que nuestro trabajo como futuristas consiste en sacar a las empresas de la zona de confort. Por último, dotamos a la tecnología de gran importancia puesto que ha sido la encargada de determinar los cambios sociales”.

Por ejemplo, Shell, la empresa británica de hidrocarburos, comenzó a advertir de que el barril de petróleo subiría de 2 a 10 dólares, por ello, se prepararon y consiguieron posicionarse entre las principales empresas de su sector sin antes estarlo. “Trabajar con escenarios no es suficiente, hay que revisarlos constantemente, y hablar de los distintos actos que podemos llevar a cabo para lograr el futuro que consideremos”, afirmaba Isabel Fernández Peñuelas.

Pablo Oliete, CEO y fundador de nuestra plataforma, preguntó a la directora de Estudios de Futuros en The Futures Factory, acerca de “la importancia de perfiles que analicen los escenarios de futuro y la necesidad de identificar por parte de las compañías los riesgos del porvenir”, a lo que Isabel Fernández-Peñuelas, contestó que “cada vez hay más demanda de gente que conozcan las metodologías de desarrollo de escenarios. Estos perfiles se involucrarán dentro de los departamentos de innovación. van a complementar a los perfiles de director de innovación. En cuanto a la necesidad de identificar los riesgos, la idea que intento transmitir es que el futuro debemos de construirlo, el futuro no es algo que pase porque sí. La anticipación de un escenario único no servía de mucho, lo cuantitativo ahora lo utilizamos para simular y realizar un juego del futuro para ver que estrategias ganadoras podemos tener”, confirmaba.

Adivinar el futuro puede comportar numerosos beneficios. “Hay muchos análisis que demuestran que los índices bursátiles que tienen planes mayores a cinco años tienen muchas mmás posibilidades de sobrevivir. Si vas a vivir de espaldas a lo que está ocurriendo ahora es un error. Vivimos una transformación peligrosa y al mismo tiempo llena de oportunidades, por ello, si te mantienes al margen estás errando. Mi consejo es que de vez en cuando hay que olvidarse un poco de la cuenta de resultados”, sentenciaba.

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