Francisco Nuez (Accenture): «Un cliente pedía casos de uso cloud: los cinco que vimos hace tres meses son ya 17»

Qué está pasando con el cloud en España

Nuestras cifras de crecimiento en cloud son espectaculares, y también la de los hyperscalers. Y esto no ha hecho más que empezar. Hace dos años y medio creamos la unidad Cloud First y, en aquel momento, la sensación era que Estados Unidos iba por delante, luego venía Europa y, dentro de ella, en España íbamos un poco retrasados. Pero en muy poco tiempo nos hemos ido alineando todos y en España lo hemos hecho por completo. Hemos pasado a estar en todas las agendas este año. No hay conversación con ninguna organización, y casi me atrevería a decir en tecnología y en negocio, en la que este tema no salga.

A qué atribuyes este fenómeno, qué espita ha saltado.

A que la gente está empezando a entender que esto es un cambio de las reglas de juego, y si no te subes a ese cambio te quedas atrás, y de una manera espectacular. Los CIO, los CEO, los CTO, se han dado cuenta. Se usa mucho el ejemplo del teletrabajo en el Covid-19, pero es verdad que esto cambia el paradigma, porque pone a tu disposición unas capacidades que eran impensables hasta hace poco.

En Accenture tenéis la visión de la nube como un continuum y eso encaja con una de las grandes tendencias actuales: la empresa como ecosistema.

El cloud es una nueva forma de consumir la tecnología por parte del negocio. No se trata de dedicar seis meses o dos años a migrar, y se acabó. Es un cambio de paradigma, un nuevo modelo, una nueva forma de trabajar. Lo primero que hay que entender es para qué voy a utilizar el cloud, porque el gran problema muchas veces se plantea cuando el cliente dice: “me voy al cloud porque mi CPD se me ha quedado pequeño y me va a salir más barato”, según el business case que alguien le ha hecho. El gran cambio es la elasticidad, la flexibilidad con la que puedo tomar más riesgos. Puedes ser más agresivo a la hora de experimentar o de utilizar una herramienta que ya está disponible en el mercado, porque es el servicio de un hyperscaler, si no vuelvo para atrás. La palabra continuum va en esa dirección.

Cuéntame proyectos en los que haya participado Accenture con esta filosofía de aplicar la tecnología con una visión más sistémica del cloud. Aterricémoslo.

Si algo correlaciona 1:1 en toda su esencia es el cloud y los datos. Si las combinas, te salen unos casos de uso impresionantes. Hay un cliente importante con el que estamos pensando un gran proceso de transformación. Con buen criterio, nos plantea: “esto que me dices quiero ver si es verdad, quiero ‘tocarlo’”. Hicimos un ejercicio en el que identificamos cinco casos de uso que van desde el negocio hasta la infraestructura. Empezamos a analizar qué problemática de negocio le duele, a mirarla, a ver qué podemos hacer, a analizar datos, algoritmos, inteligencia artificial, para hacer implementación y desarrollo rápido y escala. Fruto de este trabajo, vamos ya en estos momentos por 17 casos de uso frente a los cinco iniciales, en apenas tres meses. El cliente está… …alucinando… Se está volviendo loco. Es un cambio de paradigma tan grande que te permite sondear productos en el mercado que no podías antes analizar. Empiezas a ver cómo reaccionan tus clientes en tiempo real prácticamente. Y la capacidad de alterar los procesos internos de las grandes organizaciones es enorme. Son herramientas que no estaban disponibles hace unos pocos años y que sólo se pueden utilizar en cloud con unos niveles de éxito increíbles y eficiencias superiores al 80% en muchos procesos.

Has mencionado la necesidad de mejorar la experiencia de usuario y el servicio al cliente.

Con las nuevas herramientas de que disponemos, podemos construir la multicanalidad y que además sea una experiencia integrada, porque los datos se comparten en todos los sitios. Cuando haces una foto a un Qr en un escaparate ya sabemos que te has interesado, quién eres y dónde vives, y cuando entras en otro canal puedo cruzar los datos. Esa capacidad te da una potencia infinita. Ahora, en tiempo real, modelizas productos, los pruebas y si te gusta el resultado continúas. Puedes meter servicios complementarios a tus aplicaciones o, en el caso del autoservicio, gracias al dato cruzado tienes capacidad de predecir y ser proactivo con tus clientes, es impresionante.

En la mayoría de empresas el legacy tiene aún un peso enorme.

El mundo va a ser híbrido, con mayúsculas. Me podré quitar una gran parte de mi legacy y otra parte la tendré que dejar ahí porque al final cambiarla no me aporta valor. En muchas conversaciones con colegas les digo que el cloud es un nuevo modelo, no significa que yo tengo los datos en Frankfurt en el CPD de un hyperscaler, es una nueva forma de construir las piezas y de consumirlas, y es un modelo comercial, técnico. Todo esto estará relacionado. Se habla del internet of cloud, en el que tendremos diferentes infraestructuras a las que les iremos cambiando el peso, pero, eso sí, conectándose todas e intercambiando datos.

La figura del orquestador de nubes irá ganando relevancia.

Este es el nuevo paradigma y, para entidades como Accenture, asumiendo que el mundo es complejo, facilita nuestra labor. En esa orquestación de todo, pensamos que nos movemos bien, porque tenemos especialistas en todos los ámbitos. Hace años se usaba la palabra integradores, y si alguna vez toma protagonismo va a ser ahora. Vamos a vivir con todas esas infraestructuras y tecnologías.

Háblame de la estrategia que va a seguir Accenture.

El juego empieza ahora, en mi opinión. Hasta ahora se ceñía a ese ejercicio de divulgación y de comprender, y ya todo el mundo está probando, hay muchas cosas hechas en real. Pero cuando miras las cargas de trabajo, no más del 10% están en público. Si pensamos en el privado, a lo mejor nos vamos al 20-25%. Vivimos un año muy complicado en el que el que se duerma va a perder el tren. Este año se va a producir un cambio de escala.

2022 ha sido muy intenso en alianzas estratégicas, y el 2023 da la sensación de que ‘ahora sí’ en cloud.

Más o menos las alineaciones están, sí. Lo primero es tener muy clara la estrategia, que no es el cloud por el cloud, sino cómo lo vas a aprovechar para cambiar tu negocio. Lo segundo es diseñar y construir esas piezas, componentes y herramientas que necesitas para tener un modelo híbrido y multicloud. Y mete el dato en el centro y asegúrate de que toda tu organización es capaz de consumirlo, de beneficiarse de sus ventajas. Si haces todo esto y no cambias tu modelo operativo estás muerto, porque el cloud es una forma distinta de hacer las cosas. Significa cambiar tus operaciones internas y tu talento. Tecnología y negocio se tienen que aunar.