Más conectividad, con estrategia e inteligente

La mesa redonda titulada “Construyendo el nuevo mundo conectado desde la industria” ha reunido a referentes de múltiples sectores para discutir el futuro de la conectividad y su impacto en la Industria 4.0. La conversación, moderada por Sergio Martín, de TVE, ha sido protagonizada por Fran Alcalá, de Celestia TST; Cristina Izquierdo, de Vodafone; José M. Nazabal, de Honeywell; Ignacio Gañán, de Grupo Sulo; y Roberto García, de Grupo Ambar. El conglomerado de expertos también aportó un análisis detallado sobre cómo la conectividad y gestión de datos moldean la evolución de las empresas, al tiempo que han establecido indicios sobre la conectividad en los próximos 20 años

Entre los referentes ha emergido la idea de la “conectividad como un canal”, lo que permite la transmisión de la información e impulsa el desarrollo de tecnologías como el 5G y el internet de las cosas (IoT). Sin embargo, los ponentes también han coincidido en que la clave no reside solo en la infraestructura de comunicación, sino en “la gestión inteligente de los datos”.

Sobre el último factor, Ignacio Gañán ha destacado que se debe tener claro el propósito que existe detrás del uso de los datos. “Tenemos millones de datos, pero lo crucial es qué hacemos con ellos”. A su vez, ha indicado que “no se trata de acumular información, sino de tener un objetivo claro que permita obtener un valor real”. 

Respecto a la industria 4.0, el experto concluye en que “los datos son el recurso más valioso”, aunque su utilidad depende de cómo sean analizados y empleados a la hora de tomar decisiones estratégicas.

Una postura similar ha sido la de Cristina Izquierdo, al sostener que los sectores más avanzados en tecnología son los que han logrado definir con precisión “qué datos necesitan y para qué los utilizan”. La experta ha explicado que “en sectores como el de la gestión del agua, el despliegue de comunicaciones se orienta a KPIs muy claros, lo que permite optimizar tanto los recursos como los procesos”. A pesar de que la infraestructura tecnológica se encuentre en constante evolución, el verdadero valor reside en el “propósito definido que persigue cada proyecto”.

Respecto al 5G, aunque a menudo es considerado como la próxima “gran revolución tecnológica”, ha sido tratado con “pinzas” por los expertos. Fran Alcalá ha asegurado que “el 5G es una evolución natural de la conectividad” y no una revolución en sí misma. “La conectividad no es más que el canal que permite que la información fluya de un lado a otro”, y ha puesto de relieve que, aunque la tecnología 5G aporta mejoras significativas, no es la única solución disponible ni siempre la más adecuada para la totalidad de las situaciones.

Cristina Izquierdo ha afirmado que en Vodafone alrededor de cuatro millones de líneas utilizan “tecnologías de conectividad más antiguas, como el 2G”, en especial en sectores donde la eficiencia energética y la baja potencia son más cruciales que la velocidad de transmisión de datos. “El 5G posee aplicaciones clave en entornos críticos como la protección de empleados y la gestión de fábricas en tiempo real, pero en otros contextos, el 2G sigue siendo más eficiente”. 

Para “maximizar el valor de la conectividad”, José María Nazabal ha indicado que una de las claves es “mantener los datos limpios y organizados”, ya que ello determina la “calidad de la información” y, en última instancia, la “toma de decisiones”. También ha insistido en que la tecnología en el campo se encuentra en constante evolución, por lo que las empresas deben ser capaces de “adaptarse y auto desafiarse” para mantenerse competitivas.

Sobre la conectividad en zonas remotas, donde las infraestructuras tradicionales, como el 5G, aún no han llegado, Ignacio Gañán ha abordado la posibilidad de combinar tecnologías para asegurar la conectividad en entornos complejos. Para ello, se ha basado en soluciones como Starlink, el sistema de satélites de SpaceX, que según el experto “podrían ser una opción viable en los próximos 20 años”. No obstante, ha afirmado que “a veces es más útil combinar tecnologías en lugar de apostar todo por una sola solución”.

A su vez, Roberto García ha recordado que a menudo “solo nos acordamos de la importancia de las comunicaciones cuando fallan”, al tiempo que Fran Alcalá ha destacado que, “invertir en conectividad debe estar alineado con un propósito claro”.

La sostenibilidad ha sido otro de los temas clave para los expertos. Cristina Izquierdo ha destacado el “impacto positivo del 5G en la eficiencia energética”, en especial en la optimización de infraestructuras críticas como fábricas o redes de servicios públicos. Sin embargo, ha subrayado que las tecnologías de baja potencia, como las utilizadas en el IoT, “seguirán siendo esenciales en aplicaciones que requieren bajo consumo y larga duración”.

En un sentido similar, Ignacio Gañán ha añadido que el uso de la nube para almacenar datos debe ser “repensado”, al tiempo que ha sugerido limitar la publicación de datos y centrarse en los más relevantes, un aspecto que puede ser más “eficiente y rentable para las empresas”. También José M. Nazabal ha destacado la importancia de “garantizar la seguridad de los datos” en un entorno cada vez más interconectado, y ha concluido en la necesidad de implementar “estrategias robustas” que aseguren su protección y gestión eficiente ante el continuo crecimiento de la información.